"Brasil pasará de 'dictablanda' a dictadura": Ernesto Samper
Durante un foro en Buenos Aires, el expresidente colombiano aseguró que tras la victoria de Jair Bolsonaro en Brasil, la situación en ese país cambiará y pidió hacer esfuerzos para tratar de que se respeten los derechos de Lula da Silva
23/11/2018 15:46
Créditos da foto: Jair Bolsonaro tomará posesión de la presidencia de Brasil el primero de enero de 2019 (AFP)
El expresidente de Colombia Ernesto Samper (1994-1998) aseguró este jueves en un acto en Buenos Aires que en Brasil se está "consolidando una dictablanda que va a ser dictadura en pocos meses" tras la victoria en las elecciones presidenciales del ultraderechista Jair Bolsonaro.
"Se está consolidando una dictablanda que va a ser dictadura en pocos meses y en ese momento es que necesitamos hacer los mayores esfuerzos para tratar de que se respeten los derechos de (Luiz Inácio) Lula", defendió Samper, quien insistió en que el exmandatario brasileño, encarcelado desde el pasado abril, sufre un "secuestro judicial".
A su juicio, la decisión del juez brasileño Sergio Moro -responsable en primera instancia de la operación Lava Jato- de encarcelar a Lula da Silva por corrupción responde a un "sistema neoliberal en el cual se negocia con la justicia" y no se debe a la justa interpretación de la ley.
"Es absolutamente inmoral que el juez que aparecía como la carta neutral que estaba decidiendo el futuro de la ética en Brasil, que estaba persiguiendo sistemáticamente al Partido de los Trabajadores (PT), cuando gana el enemigo del PT simplemente se va (...) y sale con la camiseta del gobierno del que ganó", alegó Samper sobre la designación de Moro como ministro de Justicia de Bolsonaro.
Durante su participación en la primera edición del Foro Mundial de Pensamiento Crítico, que se celebra hasta mañana en la capital argentina, coincidió con la secretaria internacional de Juristas por la Democracia, la brasileña Carol Proner, en que actualmente se vive una "guerra judicial", con la que ciertos sectores del poder utilizan los procesos judiciales para eliminar a la competencia.
Samper, también exsecretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), aseguró que la detención de Lula "sin pruebas" es un ejemplo de la judicialización de la política, que responde "a los jueces actuando directamente como actores políticos", por lo que denunció que está "en riesgo la separación de poderes".
En esa línea, indicó que el encarcelamiento de Lula tuvo lugar en medio de un "régimen excepcional", tal y como se aplicó con las FARC, ya que se le responsabiliza a él, como líder del PT, como si su formación política fuera "una organización criminal", por "los pecados que seguramente pudieron cometer" quienes estaban dentro de su partido.
Estas denuncias y reflexiones las realizó durante una charla titulada "Guerras jurídicas y estado de excepción en América Latina", donde tanto Samper como Proner insistieron en que es un modelo que se repite en otros países, como Colombia, Estados Unidos y Argentina.
Por su parte, Proner advirtió que estas "guerras judiciales", que forman parte de las "guerras híbridas o no convencionales", tienen un éxito "indiscutible" y unos resultados "devastadores e imprevisibles".
Insistió en que, en estos modelos, la capacidad de imponerse del Poder Judicial sobre los otros poderes va acompañada por un apoyo mediático y de un Ministerio Público "libre de control", capaz de lograr "un objetivo militar" por medio de la ley.
"La resistencia a esa guerra jurídica es muy difícil" y "todavía somos muy frágiles", pero "confiamos en la ley y confiamos en la Justicia", sostuvo Proner.
*Publicado originalmente em El Espectador
"Se está consolidando una dictablanda que va a ser dictadura en pocos meses y en ese momento es que necesitamos hacer los mayores esfuerzos para tratar de que se respeten los derechos de (Luiz Inácio) Lula", defendió Samper, quien insistió en que el exmandatario brasileño, encarcelado desde el pasado abril, sufre un "secuestro judicial".
A su juicio, la decisión del juez brasileño Sergio Moro -responsable en primera instancia de la operación Lava Jato- de encarcelar a Lula da Silva por corrupción responde a un "sistema neoliberal en el cual se negocia con la justicia" y no se debe a la justa interpretación de la ley.
"Es absolutamente inmoral que el juez que aparecía como la carta neutral que estaba decidiendo el futuro de la ética en Brasil, que estaba persiguiendo sistemáticamente al Partido de los Trabajadores (PT), cuando gana el enemigo del PT simplemente se va (...) y sale con la camiseta del gobierno del que ganó", alegó Samper sobre la designación de Moro como ministro de Justicia de Bolsonaro.
Durante su participación en la primera edición del Foro Mundial de Pensamiento Crítico, que se celebra hasta mañana en la capital argentina, coincidió con la secretaria internacional de Juristas por la Democracia, la brasileña Carol Proner, en que actualmente se vive una "guerra judicial", con la que ciertos sectores del poder utilizan los procesos judiciales para eliminar a la competencia.
Samper, también exsecretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), aseguró que la detención de Lula "sin pruebas" es un ejemplo de la judicialización de la política, que responde "a los jueces actuando directamente como actores políticos", por lo que denunció que está "en riesgo la separación de poderes".
En esa línea, indicó que el encarcelamiento de Lula tuvo lugar en medio de un "régimen excepcional", tal y como se aplicó con las FARC, ya que se le responsabiliza a él, como líder del PT, como si su formación política fuera "una organización criminal", por "los pecados que seguramente pudieron cometer" quienes estaban dentro de su partido.
Estas denuncias y reflexiones las realizó durante una charla titulada "Guerras jurídicas y estado de excepción en América Latina", donde tanto Samper como Proner insistieron en que es un modelo que se repite en otros países, como Colombia, Estados Unidos y Argentina.
Por su parte, Proner advirtió que estas "guerras judiciales", que forman parte de las "guerras híbridas o no convencionales", tienen un éxito "indiscutible" y unos resultados "devastadores e imprevisibles".
Insistió en que, en estos modelos, la capacidad de imponerse del Poder Judicial sobre los otros poderes va acompañada por un apoyo mediático y de un Ministerio Público "libre de control", capaz de lograr "un objetivo militar" por medio de la ley.
"La resistencia a esa guerra jurídica es muy difícil" y "todavía somos muy frágiles", pero "confiamos en la ley y confiamos en la Justicia", sostuvo Proner.
*Publicado originalmente em El Espectador
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